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CAPÍTVLO DE LOS COMVN HICHEZEROS1: Los común hechezeros que uzauan en este rreyno y los ay agora. De ellos
es como se sigue:
El primero, hichezeros muy malos que uzan de darse uenenos y ponsoñas
para matar, que ellos les llaman hichezero, hanpicoc
a. Y con ello le mata, unos
mueren presto, otros tarde. Y se seca un año y se pone como un palo y
se muere. Primero sólo el Ynga tenía y no tenía otro ninguno. Y los yndios
que tenía desta ponsoña luego les mandaua matar. Tirando con piedras lo
mataua a toda su generación, que no quedaua uno ni ninguno, cino fuese
niño de teta.
Cómo los yndios hichezeros hacían tinquichi [hacer juntar]. Ajuntan al
hombre con la muger para que se enamoren y haga gastar al hombre. Dizen
que queman en una olla nueua llamado ari manca
b el sebo con mundicias
con mucho fuego. Dallí dizen que les llama el dicho hechizero al demonio
y lo haze por suerte y obra del demonio el hichesero.
Cómo descasan y le desenamoran a los cazados o solteros, lo propio como
arriua dicho. Los dichos hichezeros aproeuan y hablan con los del ynfierno.
Cómo se echan maldiciones a unos y a otros, haziendo serimonias. Dizen
que soplan con mays molido y senisa y con sus cauellos del quien le quiere
mal. Para ello dizen que procura hurtársela y se la quema y sopla.
Cómo para saluarse de las manos de la justicia el ladrón o matador o el
hichesero a los dichos contrarios le sopla con el dicho polbo de mays que
llaman uayrap zaran y güeso de defuntos. Lo soplan y dizen que uan soplando
a la justicia y al contrario con ella,
Cómo los yndios tienen custumbre, cuando les hurtan o le toman quatro
masorcas de mays o papas de las chacaras [sementera], toman las hojas y lo
atan en palos
/ hampikuq / t'inkichiy / ari manka / wayrap saran / chakra /
a curandero | b olla sin estrenar | c maíz del viento
Guaman Poma escribió este capítulo al principio de la campaña de la “extirpación de idolatrías” que se acentuó en los Andes con la llegada del arzobispo Lobo Guerrero. Éste era procedente de la sede de Granada, donde había supervisado los preparativos para la expulsión en masa de la población autóctona. Tanto como la población andina, los granadinos conquistados en 1492 habían aceptado el bautismo, convirtiéndose en “moriscos”. En 1609 fueron deportados de la península. Véanse Domínguez Ortiz y Vincent, 1978 [Bib]; Duviols, 1971 [Bib].