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IGLECIA

Que en este rreyno en los pueblos chicos o grandes ayga escuela y sepan leer, escriuir, cantar canto de órgano los dichos niños y niñas todos. Porque ací conbiene para el seruicio de Dios y de su Magestad y buena pulicía y cristiandad. Y, ci pudieren, entre al estudio los hijos de los prencipales por la rrazón no se concierte los padres ni los caciques por lo dicho, cino el corregidor y el administrador de la yglecia en todo este rreyno.

Y que si se consertare en cada pueblo el cabildo, alcalde o cacique, le pague al dicho maystro un patacón cada muchacho y un almud de maýs, otro de papas. Y ci es pobre, quatro rreales y un almud de maýs. Y ci es güérfano, que no le pague nada, cino que los domingos y fiestas le trayga una has de leña y le ayude en su sementera cuando se ofreciere en el año, acimismo las muchachas. Y que no le ocupe en traer leña ni trauajar ni mascar maýs para chicha.

Y cin falta sepa leer, escriuir los niños, niñas en todo el mundo y más en este rreyno. Y ancí se perderá la ydúlatra y serimonia de los demonios. Ya se ubiera perdido; por causa de los saserdotes los ay todauía. Y ancí le ponga pena al dicho padre en este rreyno.

Que un maestro estaua en Santiago de Queros, un yndio llamado Damián, yndio Changa, del pueblo de Santiago de Uayanay, el qual se auía consertado por un año de enseñar a los muchachos leer, escriuir, cantar por ochenta pesos y de comer. Porque le daua gusto al padre, se le pagaron y en todo el año no le enseñó a los muchachos de la dicha escuela ni sauía la dotrina. Todos los días estaua borracho, perdido y uellaqueando y ganando salario por el gusto del padre a costa de los yndios.

Y ancí deue no ser consertado con los yndios ni con el padre, cino con el corregidor o con el administrador de la yglecia. Acauado el año, se tome qüeenta [sic] y rrecidencia a los dicípulos. Ci supieren bien, sea pagado el dicho salario los doze pesos y de comer al dicho maystro. Y ci los dicípulos saue muy bien, torne a consertar otra ues. Y cienpre dure el dicho oficio y ci no fuere borracho ni coquero. Y cada mañana, con los que sauen, rresen cantada en la yglecia y diga la salue y uísperas a las tardes el dicho maystro en todo el rreyno, y rruegue por los bibos y muertos en el corro en este rreyno.