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CONZEDERACIÓN
ganallo los cristianos ni lo ganará, sauiendo de tanto trauajo de yndios.
Conzederando desto su Magestad, deue bolber por sus caciques principales
y de yndios pobres deste rreyno. Y no ay otro quien mejor buelba como quien
tiene mejor derecho por la ley de que no ay otro nenguno, cino el rrey
para esto.
Aués de conzederar que los enbajadores que enbió el rrey enperador de
puro goloso quísose alsar y se alsó con la tierra y quiso ser otro rrey Ynga.
Aués de conzederar que, como se quicieron alsarse, binieron con expresa
lisencia del muy santo padre papa de Roma y del glorioso cristianícimo enperador don Carlos. No truxo zédula para matar al rrey Ynga ni a los excelentícimos señores ni a los capitanes deste rreyno. Para alsarse con la tierra
primero mató, acauado se alsó con la tierra y con la corona rreal de su Magestad don Francisco Pizarro y don Diego Almagro y Gonzalo Pizarro, Caruajal
y Francisco Hernandes Girón. Y se defendió el señor rrey enperador y gastó
y trauajó de defenderse.
Y ací aués de conzederar y acauar con esto. Que no ay comendero ni
señor de la tierra cino son nosotros propetarios lexítimos de la tierra por
derecho de Dios y de la justicia y leys1. Quitando al rrey que tiene derecho,
no ay otro español. Todos son estrangeros, mitimays, en nuestra tierra en
nuestro mando y señorío que Dios nos dio. Y conzedera, cristiano.
Prólogo a los letores de las conzederaciones:
Aués de conzerer, cristiano letor, de todos los capítulos, conzederaciones.
Mira atentamente en tu ánima y corasón que un capitán general de una armada de una conquista que lleua más de mil soldados a costa de un rrey.
Este capitán general
/ mitmaq /
Véanse p. 564 y nota 3.